Los 9 escondites de dinero que más usa el cubano

Guardar billetes o monedas en sitios insospechados es una tradición de algunos cubanos, sobre todo de los lejanos a la modernidad y reacios a bancos populares de ahorro.

Esta tendencia, si bien ha disminuido en nuestros días, todavía existen en personas que, lejos de utilizar tarjetas magnéticas o cuentas bancarias, echan mano a recipientes, escondites o alcancías improvisadas para resguardar su capital.

Los hay abuelos y adolescentes, no hay límite de edad para semejante hábito, pero muchos se han tropezado con varios inconvenientes, el más “terrible” que otra persona descubra su tesoro.

Cubanos Gurú relaciona 9 de los más singulares escondrijos, que parecen responder a una máxima: “el dinero es mejor tenerlo entre las manos”.

Bajo el colchón

Es el lugar digamos que “típico” de los más adultos o los más guajiros (campesinos). Lo mismo puede ser debajo, a los pies, en la esquina de la cama o dentro del colchón, protegido por una costura superficial.

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Latas

Nadie adivina que una suma considerable de dinero puede esconderse en una lata de tomate, de compota o de cualquier producto industrial. Se hacen los paquetes o bultos de billete con una liga y se optimiza el espacio.

Gavetas

En un escaparate, un escritorio o cualquier mueble del hogar es muy probable que se almacene dinero. Eso sí, protegido, bajo candado o con la más difícil contraseña que se supo jamás.

Bolsillos

Aquella prenda antiquísima que jamás nadie se pone, aquel saco o camisa guardado en un closet, sirven como “caja fuerte” y recipiente para proteger los fondos personales.

Botijas

Es una variante de dinero enterrado que utilizaban nuestros antecesores. La botija es una vasija que usan los campesinos para trasladar la leche u otros líquidos. Algunos suelen emplearla para escondite del dinero y la entierran en el patio de la casa. Solo en caso de emergencia, se extrae, con la precaución de que no haya nadie cerca.

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Zapatos

Un par de botas, unos botines o unas alpargatas viejas se prestan para semejante “depósito”.

Pinturas

Detrás de los cuadros o pinturas es común guardar el dinero. La imagen evoca algunas películas donde los personajes usaban este recurso para proteger su capital. Detrás de la imagen, hay un orificio o escondrijo en la pared.

Ropa interior

Aunque parezca atrevido o increíble, algunas mujeres fabrican minibolsillos en su ropa interior para trasladar efectivo. Esta variante aplica fundamentalmente para viajes al extranjero, donde es necesario burlar o esquivar ciertas preguntas o controles aduaneros.

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Equipos electrodomésticos

Radiograbadoras, ventiladores y televisores, entre otros, son muy útiles para esconder la plata.

En países como Uruguay, y de acuerdo al sitio BBC Mundo, hay un desbalance entre las personas que mantienen su dinero en casa y los que depositan en los bancos. Aquellos rondan el 64 % y el restante solo el 32 %, cita el diario La Razón.

La desconfianza y las crisis bancarias son los factores que favorecen esta tendencia a ratos mundial, donde Cuba y los cubanos también aparecen en la lista.

¿Qué dice usted sobre esta realidad? ¿Usted también tiene su guanajita echá?

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